Acción Inclusiva

Tiempo atrás, existieron formas específicas para enseñar, y, de igual forma, había un trato muy especial hacia los estudiantes que tenían algún tipo de discapacidad, ya sea motriz, intelectual, sensorial, auditiva, etc. Por entonces, se les rezagaba o mandaba, si es que existía, a lugares particulares y “profesionales”. Según la conapred (2013), “La discriminación hacia las personas con discapacidad parte de un grave error. Hay quienes creen que la sociedad se divide en: ‘normales’ o ‘competentes’ y en ‘anormales’ o ‘incapaces’, situación que los excluye de la colectividad, los nulifica”.

A partir de eso, lamentablemente nunca explotaron el potencial que ellos tenían, todo lo que podían ofrecer, tanto para el mundo como para la sociedad; nunca se les dio esa oportunidad. Pero, de igual forma, apenas se sabía cómo lidiar con la sordera o ceguera. No existían, como ahora, aparatos que permiten una mejor enseñanza o nuevos métodos creados a partir de varios estudios, donde personas interesadas en el tema decidieron tomar cartas en el asunto para poder brindar una mejor educación, y que, gracias a ello, se puede abarcar mejor en el ámbito educativo.

Pero, a todo esto, ¿cuál es el problema si ya se cuenta con nuevos métodos, estrategias e inclusive aparatos que permiten una mejor inclusión? Según sedesol (2016), los estudiantes con discapacidad intelectual son los que más sufren el rezago educativo, seguidos de los que tienen discapacidad visual, auditiva y motriz, aunque la realidad es otra. Existe una pantalla que no permite saber la verdadera situación que enfrentan niños, jóvenes e incluso adultos.

Haciendo referencia a lo anterior, hace dos semanas, hubo un seminario de educación inclusiva que se llevó acabo en la Facultad de Educación. En éste seminario, hubo ponentes, congresistas y maestros no sólo del área de inclusión, sino también maestros de profesión, se dedicaban a la enseñanza. Ellos hablaron sobre las problemáticas actuales y cómo poder lidiar con estas situaciones, adaptaciones necesarias para que las escuelas puedan aceptar estudiantes con discapacidad. También, hablaron de la existencia de oposición de maestros que no están interesados en dicha cuestión, porque no les interesa, porque tienen que re-adaptar su clase o porque tienen que tomar actualizaciones metodológicas y estratégicas para una verdadera inclusión.

En referencia a lo anterior, a los maestros se les hace fácil rezagar. Y no sólo ellos son partícipes, inclusive las mismas escuelas son las que hacen a un lado a estos niños y jóvenes. Si ellos los aceptan, entonces tendrían que adaptar la infraestructura misma con rampas, señales, caminos, e inclusive letreros en braille. Pero, los administrativos lo consideran un gasto más y, por eso, no lo aceptan.

En conclusión, existe un largo camino, pero se puede llegar si las personas, y no sólo los docentes, aceptan este reto de inclusión, reto porque se tiene que eliminar la idea de que las personas con discapacidad no pueden, son inútiles, nunca van a ser algo en la vida. Una acción inclusiva que permita a las personas con discapacidad a no sólo formar parte de la sociedad, sino que también sean partícipes en las toma de decisiones, en la asistencia a eventos, festivales, trabajos y escuela. La conapred (2013) menciona que la unicef reitera que “La discriminación de la que son víctimas niños y niñas con discapacidad puede afectar su salud y su aprendizaje, limitar sus oportunidades de participar y hacerlos más vulnerables a la violencia, el maltrato y la explotación”. No destruyamos la vida que apenas va comenzando.

Referencias

conapred. (2013). En el Día de la Niñez, por una educación inclusiva: respeto a las personas con discapacidad y población indígena. Recuperado de http://www.conapred.org.mx/documentos_cedoc/Dossier_Ed_Inclusiva_25_abril_2013_INACCSS.pdf

sedesol. (2016). Diagnóstico sobre la situación de las personas con discapacidad en México. Recuperado de https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/126572/Diagn_stico_sobre_la_Situaci_n_de_las_Personas_Con_Discapacidad._Mayo_2016.pdf

Mario Alberto Israel Pastor Alvarado (1994, Yucatán-México). Estudio Enseñanza del Idioma Inglés en la Universidad Autónoma de Yucatán. Tiene 23 años. La educación inclusiva es algo que ve como esencial para el Estado de Yucatán, ya que con el paso del tiempo se ha dado más casos de diferentes tipos de discapacidad, y es de carácter urgente que haya la inclusión pertinente en todos los niveles.